Mi rival

La miraba, sus ojos se había clavado sobre ella. En esa disco mientras ella bailaba conmigo. Aquella mujer con su mirada insistente e insoportable había clavado sus ojos sobre mi chica.

    Sin miedo a nada, como retándome a mi, como diciendo "Cuando quiera te la quito". Resulto ser amiga de mi chica. Frene mis celos y mi orgullo se callo. Pero sabía que tantas insistencia para mi chica podría ser una tentación. Y tenía miedo de que ella cayera bajo la mirada de aquella mujer que la miraba sin contemplaciones, sin importarle que estuviera en mis brazos. Y fuera Mía.

    Sabía que a mis espaldas, todos los días la rondaba. Mi novia insistía que era solo una amiga.  Y que esa mujer no era su tipo. Que era a mi a quien quería. Insegura de mi, decidí averiguar por mi cuenta la verdad.

    Pues ambas eramos expertas en el arte de seducir. Conocíamos ese juego intenso de las miradas. Y tal vez, mi novia inexperta no comprendía que su mirada de fuego sobre ella no era la de una amiga... tenia mil intenciones más.

    Por días a mis espaldas las busco. Coincidencias, encontronazos tontos... pero siempre se encontraba a mi novia en algún lugar. Mi novia siempre me lo decía... Y yo callaba. Y mi furia aumentaba. Pero un día decidí usar la técnica más tonta. Como haciéndole caso a ese viejo dicho que dice "Si no puedes con tu enemigo, únetele"... Yo podía con ella. Pero no iba a demostrárselo de frente. Lo haría jugando su propio juego.

    Así que hice que mi novia me presentara a su amiga... y me convertí yo también es su amiga.

    Y poco a poco, su mirada de fuego debilite. Fui su espejo. Y todas las tácticas que ella intento usar para acercarse a mi novia... yo las use con ella.

    Hasta que un día su mirada de fuego se clavo en la mía. y se hizo insoportable sobre mí. Y mi ego incontrolable clavo mi mirada sobre ella.

    Y terminamos cayendo en ese juego de miradas... y conquistándonos la una a la otra.

    Que fue de mi novia... Por ahí anda con otra. Pero aquí estoy yo... con mi rival de la mano. Tanto pelear por una chica... terminamos cayendo las dos la una con la otra.